La situación laboral en A Coruña ha experimentado cambios significativos en el último año, gracias a la intervención de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Este organismo ha logrado transformar o corregir la situación de más de 5,000 trabajadores, un hecho que resalta la creciente preocupación por la precariedad laboral en la provincia. Según el balance anual, se registraron 5,027 modificaciones en las condiciones laborales, muchas de las cuales se centraron en contratos temporales y jornadas laborales infradeclaradas.
### La Lucha Contra la Precariedad Laboral
Uno de los aspectos más destacados de este informe es la identificación de prácticas laborales irregulares que han permitido a las empresas reducir costos a expensas de la seguridad y bienestar de sus empleados. La reforma laboral aprobada recientemente ha sido un pilar fundamental en este proceso, ya que ha establecido el contrato indefinido como la forma ordinaria de empleo. Esto significa que la utilización de contratos temporales debe estar justificada por circunstancias específicas, algo que no se cumplía en muchos de los casos detectados por la Inspección.
La mayoría de las modificaciones realizadas por la Inspección se dieron entre los trabajadores con la condición de fijos discontinuos. En total, 2,400 profesionales vieron su situación laboral corregida, ya que se comprobó que superaban los límites de jornada que permiten el uso de esta modalidad. Esto es crucial, ya que la conversión de estos contratos a indefinidos no solo garantiza una mayor estabilidad laboral, sino que también asegura que los trabajadores reciban el abono correspondiente por sus vacaciones retribuidas.
Además, se revisaron 1,887 contratos temporales que no contaban con la justificación necesaria para su existencia. La Inspección ha dejado claro que la temporalidad sin causa justificada no será tolerada, lo que representa un avance significativo en la lucha contra la precariedad laboral en la región.
### El Fraude de la Media Jornada
Otro de los problemas que ha salido a la luz es el denominado «fraude de la media jornada». Este fenómeno se refiere a la práctica de declarar a empleados con jornadas laborales de 20 horas semanales, mientras que en la realidad trabajan entre 30 y 40 horas. La Inspección ha corregido la situación de 738 trabajadores en A Coruña que se encontraban en esta situación, lo que pone de manifiesto la extensión de esta práctica en sectores como el comercio, la hostelería y los servicios de limpieza.
Las organizaciones sindicales han estado presionando durante años para que se refuercen las inspecciones en este ámbito, y los resultados han demostrado que su preocupación era justificada. La consolidación de las inspecciones ha permitido identificar que una parte significativa de la precariedad laboral se ha trasladado desde la temporalidad hacia el uso irregular del tiempo parcial, lo que ha llevado a un aumento en la vigilancia sobre estas prácticas.
El balance de la Inspección también revela que se detectaron 1,793 puestos de trabajo que no estaban debidamente reconocidos, de los cuales 1,530 correspondían a trabajadores que no estaban dados de alta en la Seguridad Social. Esta cifra coloca a A Coruña en el décimo lugar entre las provincias con mayor volumen de economía sumergida en el país, solo superada por grandes áreas urbanas y destinos turísticos.
La Inspección también ha identificado 190 empleados extranjeros que trabajaban sin el permiso correspondiente, así como otros casos relacionados con bonificaciones aplicadas sin cumplir los requisitos establecidos. Estos hallazgos subrayan la necesidad de una mayor regulación y control en el mercado laboral, así como la importancia de proteger los derechos de todos los trabajadores, independientemente de su situación contractual.
El avance en la regulación laboral en A Coruña es un paso positivo hacia la mejora de las condiciones de trabajo en la provincia. La intervención de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha permitido visibilizar y corregir prácticas laborales que han contribuido a la precariedad, y se espera que estas acciones continúen en el futuro para garantizar un entorno laboral más justo y equitativo para todos.
