El vicesecretario de Hacienda, Vivienda e Infraestructuras, Juan Bravo, ha presentado recientemente una propuesta del Partido Popular (PP) en el Congreso de los Diputados que busca abordar la crisis de vivienda en España. En una rueda de prensa celebrada el 4 de agosto de 2025, Bravo destacó la urgencia de desbloquear terrenos para la construcción de más de nueve millones de viviendas, lo que podría aumentar el parque total de viviendas en el país en un 25%. Esta iniciativa surge en un contexto donde el Gobierno ha sido criticado por su inacción en materia de vivienda, con promesas incumplidas de construcción de nuevas viviendas en los últimos años.
La propuesta del PP se centra en la necesidad de agilizar la tramitación de suelos y facilitar la producción de vivienda asequible. Según Bravo, hay un gran volumen de suelo que actualmente está bloqueado y que podría ser utilizado para la construcción. En España, existen terrenos con planeamiento programado para promover hasta 9,3 millones de viviendas, pero 6,8 millones de estas se encuentran en terrenos cuyos planeamientos no han sido desarrollados. Esto se traduce en un proceso administrativo que puede tardar entre cinco y 25 años, lo que retrasa la posibilidad de ofrecer nuevas viviendas a la población.
La proposición no de ley presentada por el PP incluye reformas a la actual ley del suelo, estableciendo incentivos para acelerar la urbanización de terrenos. Entre las medidas propuestas se encuentran aumentos en la edificabilidad máxima cuando se destine a vivienda protegida, mecanismos extraordinarios para desbloquear suelos en municipios con alta demanda residencial y una simplificación de los trámites administrativos. Bravo ha señalado que los costos burocráticos actuales pueden alcanzar hasta 20.000 euros por vivienda, lo que representa una carga significativa para los desarrolladores y, en última instancia, para los futuros propietarios.
Además, la propuesta del PP también contempla la identificación y valorización de suelo público infrautilizado, que podría ser destinado prioritariamente al alquiler asequible y social. Bravo enfatizó que el objetivo es que una casa deje de ser un bien exclusivo y se convierta en un bien accesible para todos los ciudadanos.
Por otro lado, el vicesecretario de Hacienda también ha criticado la baja inversión presupuestaria del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana en los últimos años. Según sus declaraciones, en 2024 se dejó de ejecutar el 67% del presupuesto destinado a vivienda, lo que equivale a más de 2.800 millones de euros. Con datos hasta junio de 2025, la ejecución presupuestaria se sitúa en un alarmante 5,3%. Bravo ha subrayado que la vivienda no era una preocupación para el Gobierno en 2018 y que, siete años después, la situación se ha convertido en un drama nacional.
La respuesta del Gobierno a las propuestas del PP ha sido crítica. Fuentes del Ministerio de Vivienda han calificado las ideas del PP como «recetas fracasadas» que recuerdan a las políticas que llevaron a la anterior burbuja inmobiliaria. Desde el Ejecutivo se argumenta que la propuesta del PP es insuficiente y hueca, especialmente después de haber bloqueado la reforma de la ley del suelo en el Congreso. El Gobierno ha manifestado que ya está priorizando la disponibilidad de viviendas para alquiler asequible a través de una nueva empresa estatal de vivienda, que ha comenzado a operar bajo el paraguas de Sepes.
El Ministerio de Vivienda ha enfatizado la necesidad de construir más viviendas, pero no de cualquier manera, como se hizo en el pasado. Se ha señalado que España presenta un déficit de vivienda protegida en comparación con otros países europeos, y el Gobierno está movilizando todos los recursos disponibles para ampliar este parque de viviendas lo más rápido posible. Además, se ha destacado la importancia de blindar la protección de este parque de vivienda, asegurando que lo que se construya hoy no sea malvendido a fondos buitres en el futuro.
En resumen, la propuesta del PP para desbloquear suelos y aumentar la construcción de viviendas en España ha generado un intenso debate en el ámbito político. Mientras el PP busca soluciones urgentes para la crisis de vivienda, el Gobierno defiende su enfoque y critica las iniciativas de la oposición. La situación actual del mercado inmobiliario y la necesidad de vivienda asequible continúan siendo temas candentes en la agenda política española.