La historia de José Luis Sánchez Domínguez es un testimonio de perseverancia y visión empresarial. Desde sus inicios como transportista de frutas y hortalizas entre Málaga y Córdoba, ha escalado posiciones hasta convertirse en el presidente de honor de Sando, una de las constructoras más importantes de España. Su trayectoria es un ejemplo de cómo la humildad, el trabajo arduo y la capacidad de adaptación pueden llevar a una persona a alcanzar grandes logros en el mundo empresarial.
**Los Primeros Pasos en el Mundo Empresarial**
Nacido en 1938, Sánchez recuerda su infancia en un contexto de posguerra, una época que, aunque difícil, le enseñó el valor del esfuerzo y el sacrificio. Desde joven, comenzó a trabajar, lo que le permitió adquirir habilidades y conocimientos que más tarde serían fundamentales en su carrera. Su primer contacto con el mundo de la construcción llegó a través de la Sociedad Española de Oxígeno, donde comenzó a transportar áridos y a realizar trabajos de movimiento de tierras.
Con el tiempo, su interés por la construcción creció y, en la década de los años 60, cuando la Costa del Sol comenzaba a desarrollarse, vio una oportunidad. A medida que se construían hoteles y otras infraestructuras en la región, Sánchez decidió dar el salto y fundar su propia empresa. Este paso no fue fácil, pero su determinación y deseo de aprender lo llevaron a establecer contactos con grandes empresas constructoras, lo que le permitió crecer y expandir su negocio.
La evolución de Sando fue gradual pero constante. A medida que la empresa ganaba reputación, comenzó a diversificarse y a abrir delegaciones en otras ciudades importantes como Sevilla y Madrid. Este crecimiento no solo se debió a la calidad de su trabajo, sino también a la confianza que logró establecer con las administraciones locales, lo que le permitió ejecutar obras de gran envergadura.
**Innovación y Sostenibilidad en la Construcción**
A lo largo de su carrera, Sánchez ha sido testigo de la evolución del sector de la construcción en España. Desde sus inicios hasta la actualidad, ha visto cómo el sector ha pasado de un crecimiento desmedido a una profesionalización constante. La modernización y adaptación a las necesidades de la sociedad han sido claves en este proceso. En Sando, siempre se ha apostado por la inversión en la empresa y en la comunidad, buscando un enfoque sostenible en todos sus proyectos.
Uno de los aspectos que más destaca en la filosofía de Sánchez es la importancia de la colaboración público-privada. A través de este modelo, Sando ha llevado a cabo proyectos significativos que no solo benefician a la empresa, sino también a la sociedad en su conjunto. La construcción sostenible se ha convertido en una prioridad, y la empresa ha trabajado en diversas áreas, desde la construcción de infraestructuras hasta la conservación del medio ambiente.
Sánchez también ha reflexionado sobre la necesidad de seguir invirtiendo en infraestructuras hídricas en España. A pesar de los avances realizados, considera que aún queda mucho por hacer, especialmente en un país que ha enfrentado problemas de sequía en los últimos años. Esta visión a largo plazo es un reflejo de su compromiso con el desarrollo sostenible y la mejora de la calidad de vida de las comunidades donde opera.
**El Futuro de Sando y la Nueva Generación**
Con sus hijos, Luis y Esther, al mando de la empresa, Sánchez se muestra optimista sobre el futuro de Sando. La posibilidad de que la tercera generación de su familia se una a la empresa es un tema que le entusiasma, ya que desea que la compañía siga creciendo y adaptándose a los nuevos desafíos del sector. Sin embargo, también es consciente de que el camino no siempre es fácil y que la prudencia y la moderación son esenciales para el éxito.
A pesar de los cambios en el mercado y la competencia, Sando ha decidido mantener su enfoque en la diversificación de servicios. Mientras que otras empresas han optado por vender sus filiales de servicios para centrarse en concesiones, Sando ha elegido seguir ofreciendo una amplia gama de servicios, lo que le permite mantenerse relevante y competitivo en el sector.
La historia de José Luis Sánchez es un claro ejemplo de cómo la perseverancia y la visión pueden transformar no solo la vida de una persona, sino también el panorama empresarial de un país. Su legado en la construcción y su compromiso con la sostenibilidad son un modelo a seguir para las futuras generaciones de emprendedores.