La comunidad autónoma de Galicia se posiciona como un referente en el ámbito del almacenamiento energético tras recibir una asignación de 104,3 millones de euros en ayudas del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE). Esta iniciativa, que forma parte de un programa más amplio que moviliza un total de 840 millones de euros en toda España, tiene como objetivo fomentar proyectos innovadores que contribuyan a la transición hacia un sistema eléctrico más sostenible y flexible.
La asignación de fondos se destinará a diez proyectos en Galicia, destacando la importancia de la región en el desarrollo de infraestructuras energéticas que integren fuentes renovables y sistemas de almacenamiento. Este impulso económico no solo representa una oportunidad para modernizar el parque de energías renovables en Galicia, sino que también refuerza su papel en la lucha contra el cambio climático y la reducción de emisiones de carbono.
### Proyectos Destacados en Galicia
Entre los proyectos que recibirán una mayor financiación se encuentran varias iniciativas vinculadas a Iberdrola. El parque eólico Pedregal Tremuzo, ubicado entre Mazaricos, Muros y Outes, se beneficiará de 14,8 millones de euros. Esta instalación, que opera desde 2003 y cuenta con 43 turbinas, combina la generación de energía renovable con capacidades de almacenamiento, lo que la convierte en un modelo de innovación en el sector.
Otro proyecto relevante es el parque eólico Muras, en Lugo, que recibirá 13,8 millones para sus dos instalaciones, que suman una potencia instalada de 49 MW. Asimismo, el parque eólico Monte Treito, situado entre Rianxo, Dodro, Lousame y Rois, percibirá 10 millones de euros.
Además, el parque eólico de Monte Redondo, en Vimianzo, gestionado por Naturgy, recibirá 6,6 millones. Este proyecto está en proceso de repotenciación, lo que implica reducir el número de generadores de 66 a 11, sin alterar la potencia instalada de 49,5 MW, lo que representa una inversión total de 65 millones de euros. Otros proyectos de menor cuantía incluyen el parque eólico de Norvento Farrapa II, que recibirá 2 millones, y el BESS Troncal en Vigo, que contará con 1,2 millones para la instalación de un sistema de almacenamiento con baterías.
### Implicaciones para el Futuro Energético
La asignación de estas ayudas no solo representa un impulso financiero significativo, sino que también tiene implicaciones profundas para el futuro energético de Galicia. La convocatoria del IDAE busca fomentar la instalación de nuevas infraestructuras de almacenamiento energético a gran escala, incluyendo sistemas eléctricos independientes, soluciones térmicas industriales, instalaciones híbridas con fuentes renovables y proyectos de bombeo hidroeléctrico.
A nivel nacional, se han seleccionado 144 proyectos innovadores que suman 2.416 MW de potencia instalada y movilizarán un total de 841,4 millones en subvenciones públicas. La categoría que concentra mayor financiación es la de proyectos híbridos con generación renovable, seguida de bombeo hidroeléctrico, almacenamiento independiente y almacenamiento térmico. En el caso de Galicia, se destinarán 14,4 millones para proyectos híbridos, 60 millones para bombeo hidroeléctrico, 14,4 millones para sistemas eléctricos independientes y 15,1 millones para almacenamiento térmico.
La diversidad tecnológica de los proyectos gallegos es notable, abarcando desde sistemas de baterías de última generación hasta instalaciones híbridas y soluciones de almacenamiento térmico industrial. Un ejemplo destacado es el proyecto destinado a la descarbonización del sector conservero, que cuenta con un presupuesto subvencionable de 18,9 millones y una ayuda superior a 11,3 millones.
La convocatoria del IDAE establece un plazo máximo de 36 meses desde la concesión de la ayuda para la ejecución de los proyectos, que deben estar concluidos antes del 31 de diciembre de 2029. Este calendario permite a las entidades planificar inversiones sostenibles y garantizar que las nuevas infraestructuras contribuyan a la transición energética de manera inmediata y duradera. Además, se establece un período de diez días hábiles para que las entidades solicitantes puedan formular alegaciones antes de la aprobación definitiva.
Con esta asignación de 104,3 millones, Galicia se consolida como la segunda comunidad más beneficiada tras Andalucía, evidenciando la importancia estratégica del almacenamiento energético para su sistema eléctrico. Estos fondos permitirán desplegar proyectos de diversa naturaleza tecnológica, desde sistemas eléctricos independientes hasta almacenamiento térmico y bombeo hidroeléctrico, posicionando a Galicia como un actor clave en la transición hacia un futuro energético más sostenible.
