La industria española ha comenzado a implementar medidas innovadoras para abordar el problema del absentismo laboral, un fenómeno que afecta a la productividad y competitividad de las empresas. En este contexto, varias compañías han decidido incluir cláusulas en sus convenios colectivos que premian a los trabajadores por mantener un bajo índice de incomparecencias. Este enfoque no solo busca reducir el absentismo, sino también fomentar un ambiente laboral más comprometido y eficiente.
En la planta de Ferroglobe Spain Metals, ubicada en Sabón, se han establecido objetivos claros para el presente año. La empresa ha fijado una meta de no superar el 4,7% de absentismo, y ha decidido recompensar a su plantilla con una bolsa de 50.000 euros si se logra este objetivo. Esta cantidad se distribuirá entre los empleados que hayan tenido menos de siete días de baja, lo que podría traducirse en un premio de aproximadamente 400 euros por trabajador. Esta estrategia es un claro ejemplo de cómo las empresas están buscando incentivar la asistencia y el compromiso de sus empleados.
El absentismo laboral se ha convertido en un tema de preocupación a nivel nacional, con una tasa de incomparecencias que alcanzó el 7% en el primer trimestre del año, según un barómetro de Randstad. Esta cifra incluye tanto las ausencias justificadas como las injustificadas, lo que complica aún más la situación. En este sentido, Ferroglobe no es la única empresa que ha tomado medidas; otras compañías en Galicia también han comenzado a implementar incentivos similares en sus convenios colectivos.
Una de las iniciativas más destacadas proviene del convenio provincial de las empresas de primera transformación de la madera en Lugo, que abarca a 2.500 trabajadores. Este acuerdo establece que, a partir del 1 de enero de 2024, si el índice de absentismo colectivo no supera el 3% y el individual el 4%, los empleados recibirán una prima de 150 euros. Para las empresas más pequeñas, con menos de 30 empleados, los límites son aún más estrictos, con un absentismo colectivo e individual que no debe superar el 2% y el 3%, respectivamente.
Además, el astillero Freire Shipyard, reconocido a nivel mundial por su especialización en buques oceanográficos, ha implementado una paga mensual por reducción de absentismo, que se revaloriza anualmente. Esta paga puede aumentar hasta cinco puntos si el índice de precios al consumo (IPC) presenta un incremento significativo. Este tipo de medidas demuestra que las empresas están dispuestas a invertir en el bienestar de sus empleados a cambio de un compromiso mutuo.
Por otro lado, Faurecia Automotive, con sede en Ourense y 369 trabajadores, ha establecido un sistema de bonificaciones hasta el año 2026. Este sistema incluye una paga sujeta a objetivos que puede alcanzar un máximo de 400 euros anuales, con un porcentaje garantizado del 75% que se complementa con la consecución de metas relacionadas con el absentismo. Esta estrategia no solo busca reducir las ausencias, sino también alentar a los empleados a contribuir activamente al éxito de la empresa.
El convenio de Autobuses Urbanos de Ourense SL también ha introducido un complemento para las bajas por enfermedad que no requieren hospitalización. En este caso, la empresa se compromete a complementar la diferencia entre la compensación de la Seguridad Social y el salario real del convenio, siempre que el absentismo se mantenga por debajo del 5%. Este tipo de medidas son esenciales para garantizar que los empleados se sientan respaldados en momentos de necesidad, lo que a su vez puede contribuir a una mayor lealtad y compromiso hacia la empresa.
A pesar de estas iniciativas, es importante señalar que la revalorización salarial en Galicia ha sido inferior a la media nacional. Los convenios firmados entre enero y abril de este año han reflejado una revalorización media del 2,94%, en comparación con el 3,39% a nivel nacional. Esta diferencia puede influir en la percepción de los trabajadores sobre su situación laboral y, por ende, en su motivación para asistir al trabajo.
En resumen, la industria española está adoptando un enfoque proactivo para combatir el absentismo laboral mediante la implementación de incentivos económicos en los convenios colectivos. Estas medidas no solo buscan reducir las ausencias, sino también fomentar un ambiente de trabajo más comprometido y productivo. A medida que más empresas se sumen a esta tendencia, será interesante observar cómo estas estrategias impactan en la cultura laboral y en la productividad general del sector.