El Partido Popular (PP) ha lanzado un ultimátum al Gobierno español, exigiendo la presentación del proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el año 2026 en un plazo de un mes. Esta advertencia se produce en un contexto político tenso, donde el PP, liderado por Alberto Núñez Feijóo, ha decidido utilizar su mayoría en el Senado para presionar al Ejecutivo. La iniciativa del PP será debatida y votada en el pleno del Senado la próxima semana, y si el Gobierno no responde a tiempo, se abrirá un conflicto de atribuciones que podría llegar al Tribunal Constitucional.
La portavoz del PP en el Senado, Alicia García, ha sido la encargada de comunicar esta postura, enfatizando que «los Presupuestos no son opcionales» y que su presentación es una «obligación constitucional». García ha criticado al Gobierno de Pedro Sánchez, argumentando que su falta de acción legislativa está llevando a España a una «anomalía democrática permanente». En su discurso, la portavoz ha subrayado que los derechos de los ciudadanos deben ser respetados y que el Gobierno debe asumir su responsabilidad en la elaboración de los Presupuestos.
### La Reacción del Gobierno ante la Advertencia del PP
La respuesta del Gobierno no se ha hecho esperar. El ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha minimizado la amenaza del PP, afirmando que cualquier recurso que presente el partido ante el Tribunal Constitucional «acabará en nada», aludiendo a que el derecho que aplica el Tribunal no se ocupa de las peticiones del Senado contra el Gobierno. Esta declaración refleja la confianza del Ejecutivo en su capacidad para manejar la situación y su desdén por las acciones del PP.
Por su parte, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido que el Gobierno está comprometido con la elaboración de los Presupuestos y que hay muchas comunidades autónomas que aún no han comenzado a trabajar en sus propios proyectos. Montero ha criticado la actitud del PP, sugiriendo que su insistencia en pedir elecciones es un signo de que no aceptan el veredicto de las urnas. En su intervención, ha asegurado que el Gobierno presentará un proyecto con «partidas históricas» que aborden las preocupaciones de los ciudadanos, especialmente en temas como la vivienda.
### Contexto Político y Económico
La situación actual en España es compleja, con un Gobierno que enfrenta críticas por su gestión económica y social. Alicia García ha señalado que, a pesar de que el Gobierno recauda más dinero que nunca, los ciudadanos están sufriendo una disminución en su calidad de vida. Ha mencionado problemas como el aumento de impuestos, el caos en el transporte ferroviario, la pobreza infantil y el alto desempleo juvenil y femenino, que sitúan a España en una posición desfavorable en comparación con otros países europeos.
La portavoz del PP ha utilizado una metáfora del propio Sánchez, quien ha dicho que «un país sin presupuestos es como un coche sin gasolina», para enfatizar la urgencia de la situación. García ha argumentado que España necesita un Gobierno que se preocupe por los problemas reales de los ciudadanos y que ofrezca soluciones efectivas.
En este contexto, el PP ha anunciado que, además de la cuestión de los Presupuestos, tiene previsto recurrir ante el Tribunal Constitucional por la falta de tramitación de 31 leyes que han sido aprobadas por el Senado. Este enfoque agresivo del PP sugiere una estrategia más amplia para desafiar al Gobierno y poner en evidencia su gestión.
La tensión entre el PP y el Gobierno se ha intensificado en las últimas semanas, con el partido de Núñez Feijóo adoptando una postura más combativa. Este conflicto no solo refleja las diferencias ideológicas entre ambos partidos, sino que también pone de manifiesto la lucha por el poder en un momento en que la opinión pública está cada vez más preocupada por la situación económica y social del país.
La falta de un presupuesto aprobado desde 2022 ha llevado a críticas generalizadas sobre la capacidad del Gobierno para gestionar adecuadamente la economía. La situación se complica aún más con la inminente llegada de elecciones, lo que añade presión sobre el Ejecutivo para que actúe rápidamente y presente un plan que satisfaga las demandas de los ciudadanos y de la oposición.
En resumen, el ultimátum del PP al Gobierno sobre los Presupuestos de 2026 es un reflejo de la creciente tensión política en España. Con un contexto económico complicado y una oposición decidida a desafiar al Ejecutivo, el futuro de la política española se presenta incierto. Las acciones del PP, así como la respuesta del Gobierno, serán cruciales en los próximos meses, ya que ambos lados intentan navegar por un panorama político cada vez más complejo.