El Partido Popular (PP) ha presentado un ambicioso plan para transformar la política migratoria en España, destacando la implementación de un sistema de «visado por puntos». Esta propuesta busca establecer un marco más estructurado y controlado para la inmigración, en un contexto donde la gestión de flujos migratorios se ha vuelto un tema candente en la agenda política. Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha enfatizado que España tiene el derecho de decidir quién entra y quién no, lo que refleja una postura más firme en comparación con las políticas actuales.
### Un Sistema de Cuotas Anuales por Países
El plan integral de política de inmigración del PP incluye la creación de un sistema de cuotas anuales por países, que se basará en la colaboración de cada nación en temas de repatriación y control de flujos migratorios. Este enfoque se presenta como un mecanismo de «premio» y «castigo», donde aquellos países que colaboren efectivamente en la gestión de la inmigración recibirán más oportunidades para sus ciudadanos en forma de visados. Por el contrario, aquellos que no cumplan con los acuerdos establecidos verán reducidas sus cuotas.
Este sistema no solo se basa en las circunstancias personales de los solicitantes, sino que también considera el desempeño de cada país en términos de cooperación con España. La propuesta busca, por tanto, ejercer presión diplomática sobre los países de origen de los inmigrantes, convirtiendo la gestión migratoria en una herramienta de política exterior.
Feijóo ha declarado que «quien colabore tendrá más oportunidades y vías legales; quien bloquee retornos o retrase trámites perderá cupos y facilidades». Esta declaración subraya la intención del PP de establecer un sistema más riguroso y eficiente que el actual, que consideran ineficaz.
### Visado por Puntos: Un Enfoque Personalizado
Además del sistema de cuotas, el PP propone un modelo de «visado por puntos» que evaluará a los solicitantes en función de criterios como la formación, la experiencia laboral, el dominio del idioma y la capacidad de integración. Este enfoque personalizado tiene como objetivo atraer a inmigrantes que puedan contribuir positivamente a la economía española, especialmente en sectores donde hay escasez de mano de obra.
El visado por puntos se dividirá en dos modalidades: el «contrato en origen» para sectores de difícil cobertura y el «visado temporal» para aquellos que buscan empleo en áreas con alta demanda laboral. Ambas modalidades incluirán controles estrictos y plazos definidos, garantizando así una inmigración regulada que refuerce la cohesión social y la competitividad económica del país.
El PP también ha destacado la importancia de la «Hispanidad» en este proceso, considerando la lengua, la historia y los valores compartidos como elementos positivos en la evaluación de las solicitudes. Esto podría facilitar la integración de inmigrantes de países hispanohablantes, alineándose con la visión del PP de una España que valora su herencia cultural.
### Críticas y Reacciones
La propuesta del PP ha suscitado diversas reacciones en el ámbito político y social. Los críticos argumentan que un sistema de visado por puntos podría ser discriminatorio y que podría dificultar la llegada de inmigrantes que, aunque no cumplan con todos los criterios, podrían aportar valor a la sociedad española. Además, algunos sectores de la izquierda han calificado estas medidas como una forma de endurecer la política migratoria, lo que podría llevar a un aumento en la xenofobia y la exclusión social.
Por otro lado, los defensores del plan sostienen que es necesario establecer un marco más claro y predecible para la inmigración, que responda a las necesidades del mercado laboral y que garantice la seguridad y el bienestar de los ciudadanos. La propuesta del PP se presenta como una respuesta a las preocupaciones de la ciudadanía sobre la inmigración, un tema que ha ganado relevancia en los últimos años debido a la crisis migratoria en Europa y a los desafíos que enfrenta España en este ámbito.
### Otras Medidas del Plan
El plan del PP también incluye otras medidas complementarias, como la vinculación del Ingreso Mínimo Vital y otras ayudas a la búsqueda activa de empleo. Los beneficiarios de estas prestaciones deberán demostrar gestiones periódicas ante las oficinas de empleo para mantener la ayuda, lo que refleja un enfoque más proactivo en la integración de inmigrantes y en la lucha contra el desempleo.
El PP se opone a las regularizaciones masivas, pero está abierto a considerar regularizaciones individuales, siempre que se cuente con los recursos necesarios para evaluar cada caso de manera justa y equitativa. Esta postura busca equilibrar la necesidad de controlar la inmigración con el respeto a los derechos de los inmigrantes que cumplen con las leyes y contribuyen a la sociedad.
En resumen, el nuevo enfoque del PP sobre la inmigración, que incluye un sistema de visado por puntos y cuotas anuales, representa un cambio significativo en la política migratoria española. A medida que se desarrollen más detalles sobre este plan, será crucial observar cómo se implementarán estas medidas y cómo afectarán a la sociedad española en su conjunto.