La reciente reunión de la mesa de diálogo en A Coruña ha marcado un hito importante en la discusión sobre el futuro de los frescos del reconocido artista Urbano Lugrís, que adornan el antiguo restaurante Fornos. Este encuentro, que tuvo lugar el 4 de junio de 2025, reunió a representantes de la Xunta y del Concello, aunque la Diputación no estuvo presente, alegando motivos de agenda. La reunión se enmarca en el cumplimiento de una proposición no de ley aprobada en el Parlamento gallego a finales de abril, que busca asegurar la preservación y posible reubicación de estas obras de arte.
La situación actual de los murales es compleja. Según el conselleiro de Cultura, José López Campos, se han analizado dos opciones principales: dejar los frescos en su ubicación original o proceder a su traslado. Sin embargo, el traslado no es la opción más favorable, ya que implicaría una inversión considerable de aproximadamente 1,2 millones de euros, además de los costos asociados a la retirada de las obras y parte de la estructura del edificio. López Campos ha enfatizado que esta alternativa es técnicamente desaconsejada, dado que podría resultar muy costosa y requerir un proceso en fases.
Por otro lado, la opción de acondicionar los murales en su ubicación actual tiene un costo estimado de 150.000 euros para la recuperación de las pinturas, además de otros 400.000 euros para adecuar el espacio y musealizarlo. Esta alternativa es la que la Xunta defiende, ya que se alinea con la estrategia del Concello y es considerada más viable. Sin embargo, para llevar a cabo esta opción, es necesario llegar a un acuerdo con los propietarios del edificio, quienes son conscientes del valor cultural de los frescos de Lugrís.
### La Valoración Económica y Cultural de los Frescos
La inversión en la recuperación y acondicionamiento de los murales de Lugrís no solo se justifica desde un punto de vista económico, sino también cultural. Estos frescos son considerados un patrimonio artístico de gran relevancia en la ciudad de A Coruña. La Xunta ha invertido hasta ahora unos 90.000 euros en la compra de los murales y en estudios técnicos relacionados con su conservación. Sin embargo, la compra del edificio que alberga las pinturas no está en la agenda inmediata, dado que los propietarios están en medio de un proceso de rehabilitación.
El conselleiro ha indicado que, con el permiso de la propiedad, podrían comenzar a trabajar en la recuperación de los murales sin necesidad de un acuerdo formal sobre la titularidad del local. Esto es crucial, ya que la falta de acción podría llevar a un deterioro mayor de las obras, especialmente si persisten los problemas estructurales del edificio. La Xunta está comprometida a invertir en el mantenimiento de los murales, siempre y cuando se garantice que el edificio no continúe deteriorándose.
El concejal de Cultura, Gonzalo Castro, también ha expresado su interés en escuchar las propuestas de la Xunta y ha subrayado la importancia de que las tres administraciones involucradas colaboren en la creación de un espacio dedicado a la obra de Lugrís. La participación conjunta es fundamental para asegurar que se tomen decisiones informadas y que se garantice la preservación de este patrimonio artístico.
### La Importancia de la Colaboración Interadministrativa
La colaboración entre la Xunta, el Concello y la Diputación es esencial para el futuro de los murales de Lugrís. La mesa de diálogo busca establecer un marco de cooperación que permita abordar las diferentes necesidades y preocupaciones de cada administración. La falta de acuerdo podría resultar en una parálisis en la toma de decisiones, lo que afectaría negativamente la conservación de los frescos.
Además, la creación de un espacio musealizado no solo beneficiaría a los murales, sino que también podría convertirse en un atractivo cultural para la ciudad, promoviendo el turismo y la educación artística. La inversión en la cultura y el arte es fundamental para el desarrollo social y económico de A Coruña, y la preservación de los frescos de Lugrís podría ser un paso significativo en esta dirección.
La situación actual plantea desafíos, pero también oportunidades para fortalecer el compromiso de las administraciones con el patrimonio cultural de la ciudad. La voluntad de diálogo y la disposición a colaborar son elementos clave para asegurar que los murales de Lugrís no solo sean preservados, sino que también se conviertan en un símbolo de la riqueza cultural de A Coruña. La comunidad espera que las decisiones que se tomen en las próximas semanas reflejen un compromiso genuino con la conservación del arte y la historia local.