El Bembrive, actual campeón del grupo 1 de la Segunda División de fútbol sala femenino, comenzó su andadura en la nueva temporada con una derrota ajustada de 1-0 ante el Vilalba. Este encuentro, que enfrentó al subcampeón y al campeón del curso anterior, se disputó en el Polideportivo Municipal de Vilalba y dejó claro que el equipo vigués aún tiene trabajo por delante para afinar su rendimiento.
### Un partido marcado por la falta de definición
Desde el inicio del encuentro, el Bembrive mostró una actitud ofensiva, creando varias oportunidades de gol. Sin embargo, la falta de puntería fue evidente, y las viguesas no lograron concretar sus ocasiones. La primera gran oportunidad llegó de la mano de Mara González, quien, junto a Anta Boullosa, tuvo varias ocasiones que fueron bien defendidas por la portera local, Alba López.
El único gol del partido llegó en el minuto 23, cuando Andrea López, tras una asistencia de Anta Leal, aprovechó un error defensivo del Bembrive para marcar. Este gol no solo significó la victoria para el Vilalba, sino que también evidenció las debilidades defensivas del equipo vigués, que no logró replegarse adecuadamente ante la presión del rival.
La ausencia de Claudia Martínez, quien se recupera de una lesión, se sintió en el campo. Martínez, máxima goleadora del país en la categoría durante dos años consecutivos, es una pieza clave para el Bembrive, y su falta se notó en la creación de juego y en la definición. Además, Lutxi González, también con problemas físicos, no pudo participar, lo que dejó al equipo sin su habitual magia y control en el medio campo.
### Un duelo de porteras
El partido se convirtió en un verdadero duelo entre las porteras, con Alba López del Vilalba y Patricia Arruti del Bembrive destacando por sus intervenciones. Arruti tuvo que emplearse a fondo para evitar que el marcador se ampliara, realizando paradas clave ante los intentos de Elvi y Alvite. A pesar de que el Bembrive buscó el empate en la segunda mitad, la defensa del Vilalba se mantuvo firme, y la portera local se mostró imbatible.
El Bembrive, en un intento desesperado por igualar el marcador, optó por jugar con portera-jugadora en los últimos minutos, lo que generó más oportunidades, pero también dejó espacios que el Vilalba pudo aprovechar. En una de estas jugadas, Alba López tuvo la oportunidad de marcar el segundo gol, pero su lanzamiento se fue desviado.
El encuentro finalizó con un 1-0 que, aunque ajustado, refleja la falta de efectividad del Bembrive en el ataque. A pesar de la derrota, el equipo mostró destellos de buen juego, pero deberá trabajar en la definición y en la solidez defensiva si quiere competir al más alto nivel en esta temporada.
### La mirada hacia el futuro
Con esta derrota, el Bembrive se enfrenta a un desafío importante en las próximas jornadas. La falta de jugadores clave como Claudia Martínez y Lutxi González ha dejado al equipo en una situación complicada, pero el cuerpo técnico confía en que, a medida que avancen las semanas, ambos regresen a la competición y aporten su experiencia y calidad.
El equipo dirigido por Gael Madarnas deberá analizar el partido y aprender de los errores cometidos. La capacidad de adaptación y mejora será crucial para afrontar los próximos encuentros. La Segunda División de fútbol sala femenino es altamente competitiva, y cada punto cuenta en la lucha por los primeros puestos.
Los aficionados del Bembrive, que se desplazaron hasta Vilalba para apoyar a su equipo, esperan ver una reacción en el próximo partido. La afición es un pilar fundamental, y su apoyo puede ser determinante para que el equipo recupere la confianza y el buen juego que lo caracterizó en la temporada anterior.
El próximo encuentro será una oportunidad para que el Bembrive demuestre su capacidad de recuperación y su deseo de luchar por el título nuevamente. Con trabajo y dedicación, el equipo tiene el potencial para revertir esta situación y seguir siendo un referente en el fútbol sala femenino.