La industria vitivinícola en Galicia está experimentando un notable crecimiento, a diferencia de otras regiones vitivinícolas de Europa que enfrentan desafíos significativos. Mientras que en Francia y Portugal se solicitan ayudas para reducir la producción debido a la caída del consumo de vino, en Galicia el sector se muestra optimista y decidido a expandirse. En los últimos años, los viticultores gallegos han demostrado su compromiso con el crecimiento, solicitando la transformación de más de 250 hectáreas de terreno forestal en viñedos entre 2023 y 2024. Esto equivale a una expansión de aproximadamente 3.400 metros cuadrados al día, una tendencia que se mantiene en 2025 a pesar de la inestabilidad del mercado.
Uno de los proyectos más destacados es el que está impulsando la bodega Martín Códax en el municipio de Vedra, A Coruña. Este proyecto, que se encuentra en consulta pública, busca desarrollar 18,7 hectáreas de viñedo en varias parcelas. La iniciativa no solo tiene como objetivo aumentar la producción de vino, sino también fomentar el desarrollo económico en el área rural, promoviendo la Denominación de Origen Rías Baixas. La bodega justifica su expansión como una forma de maximizar los rendimientos económicos y garantizar una producción sostenible utilizando los recursos disponibles. Además, se espera que el nuevo viñedo de Albariño contribuya a la fijación de la población local y genere empleo, con planes para implementar un proyecto de turismo enológico que podría ofrecer beneficios adicionales.
### La concentración de la expansión vitivinícola
La mayor parte de las solicitudes para ampliar las plantaciones de viñedo en Galicia se concentran en el sur de la región, donde se solicita el cambio de uso de tierras que representan el 85% de la superficie total. La provincia de Ourense lidera este crecimiento con 136,4 hectáreas solicitadas, seguida de Pontevedra con 78,3 hectáreas, A Coruña con 29,5 hectáreas y Lugo con 7,3 hectáreas. En los últimos dos años, se han presentado alrededor de una treintena de proyectos de inversión, de los cuales seis ya han recibido la aprobación del departamento de Medio Ambiente, abarcando cerca de 102 hectáreas, casi la mitad del total de las solicitudes.
Sin embargo, el sector vitivinícola gallego no solo enfrenta oportunidades, sino también desafíos significativos. Uno de los problemas más acuciantes es la falta de relevo generacional en la viticultura, lo que ha llevado a una disminución en el número de proveedores de uva. Para abordar esta situación, la bodega Viña Costeira ha presentado un proyecto para ampliar su viñedo en el monte comunal de Meizo, aumentando su superficie de 5,9 a 7,9 hectáreas. Este esfuerzo busca asegurar la continuidad de la producción de vino en la región y mitigar los efectos de la despoblación rural.
### Medidas para la sostenibilidad y el apoyo al sector
En respuesta a la necesidad de revitalizar el sector vitivinícola y adaptarse a los cambios climáticos, la Consellería do Medio Rural ha lanzado una nueva convocatoria de ayudas para la reestructuración y reconversión de viñedos, con un presupuesto de cuatro millones de euros. Estas ayudas están diseñadas para mejorar el cultivo de la uva en Galicia, reducir costos y orientar mejor la producción hacia los diferentes mercados. Se espera que estas medidas contribuyan a aumentar la profesionalización del sector, generando beneficios económicos para las explotaciones vitivinícolas.
El compromiso del sector vitivinícola gallego con la sostenibilidad y el crecimiento es evidente. A medida que las bodegas y viticultores continúan invirtiendo en la expansión de sus viñedos, también están buscando formas de adaptarse a un mercado en constante cambio. La combinación de iniciativas para aumentar la producción, la creación de empleo y el desarrollo de proyectos de turismo enológico son ejemplos claros de cómo el sector está trabajando para asegurar su futuro en un entorno desafiante. La viticultura gallega no solo está en una trayectoria de crecimiento, sino que también se está posicionando como un modelo de sostenibilidad y adaptación en la industria del vino.