La situación de las pensiones en A Coruña revela una profunda desigualdad que varía significativamente según el distrito en el que residen los jubilados. En particular, el tercer distrito censal, que incluye áreas como Juan Flórez, se destaca por tener las pensiones más altas de la ciudad, mientras que otros distritos, especialmente aquellos con una mayor concentración de población femenina, enfrentan cifras alarmantemente bajas. Este fenómeno no solo refleja la disparidad económica, sino que también pone de manifiesto las diferencias en la calidad de vida y el acceso a servicios básicos.
### Disparidades en las Pensiones por Género y Barrio
Según datos del Instituto Galego de Estatística (IGE), los pensionistas varones del tercer distrito, que incluye Juan Flórez y otras áreas como las plazas de Lugo y Vigo, perciben una media de 2.044 euros al mes. Esta cifra es notablemente superior a la de las mujeres pensionistas en el sexto distrito, que abarca Agra do Orzán y parte de O Ventorrillo, donde las pensiones no alcanzan los 1.070 euros mensuales. Esta diferencia de más de 900 euros es un claro reflejo de la desigualdad de género en el ámbito laboral y, por ende, en las pensiones.
Los economistas y colectivos de jubilados han señalado que las mujeres suelen tener trayectorias laborales más inestables y menos remuneradas, lo que se traduce en pensiones más bajas. Jesús Vázquez, decano de la Escuela de Relaciones Laborales de la Universidade da Coruña, explica que la concentración de personas con mayores salarios en ciertos barrios ha llevado a una segregación económica que afecta a los jubilados de zonas más desfavorecidas. En estos barrios, el desempleo es más alto y la población tiende a tener una cualificación más baja, lo que se traduce en empleos precarios y, por ende, en pensiones más bajas.
Además, la brecha de género en las pensiones es alarmante. En A Coruña, la pensión media de los hombres es de 1.628 euros, mientras que la de las mujeres se sitúa en 1.232 euros. Esta diferencia se debe en gran parte a que las mujeres ingresaron más tarde al mercado laboral y, a menudo, ocupan puestos a tiempo parcial debido a su rol como cuidadoras. Ramiro Otero, secretario general de la federación de pensionistas de Galicia de Comisiones Obreras, subraya que este sacrificio en la vida laboral de las mujeres contribuye a que sus cotizaciones sean más bajas, perpetuando así la desigualdad.
### La Calidad de Vida de los Jubilados en A Coruña
La calidad de vida de los jubilados en A Coruña también se ve afectada por la ubicación de sus residencias. Los pensionistas que viven en distritos con mayores ingresos, como Juan Flórez, disfrutan de mejores servicios y atención. En contraste, aquellos que residen en barrios como Os Mallos o Agra do Orzán enfrentan un acceso limitado a servicios esenciales, como centros de día y atención médica. Victorino Ares, portavoz del colectivo de jubilados y pensionistas de la CIG, destaca que la falta de instalaciones adecuadas en estos barrios crea dificultades adicionales para los jubilados, quienes a menudo deben desplazarse largas distancias para acceder a los servicios que necesitan.
El análisis de las pensiones por distritos revela que Juan Flórez no solo tiene la pensión media más alta, con más de 1.740 euros, sino que también se beneficia de una infraestructura de servicios más robusta. En comparación, el distrito de Agra do Orzán presenta una pensión media de solo 1.255 euros, lo que pone de manifiesto la brecha de 500 euros entre estos dos barrios. Esta diferencia no solo afecta la capacidad de los jubilados para cubrir sus necesidades básicas, sino que también influye en su bienestar general y calidad de vida.
La situación es aún más preocupante para los pensionistas mayores de 84 años, de los cuales la mitad recibe menos de 966 euros mensuales. Esta cifra es alarmante, ya que muchos de ellos enfrentan dificultades para cubrir gastos esenciales como la electricidad y la alimentación. La falta de atención adecuada en los barrios de menor renta agrava aún más esta situación, creando un ciclo de pobreza que es difícil de romper.
La disparidad en las pensiones en A Coruña es un reflejo de problemas más amplios en la sociedad, donde la desigualdad de género y la segregación económica se entrelazan para crear un panorama preocupante para los jubilados. La necesidad de políticas que aborden estas desigualdades es más urgente que nunca, ya que el bienestar de una parte significativa de la población depende de ello.