La salud articular es un aspecto crucial del bienestar general, especialmente a medida que envejecemos. Las articulaciones son estructuras complejas que permiten el movimiento y la flexibilidad, y su cuidado es fundamental para mantener una buena calidad de vida. A continuación, se presentan recomendaciones de expertos sobre cómo mantener las articulaciones sanas y flexibles, así como hábitos que pueden ayudar a prevenir el dolor y la rigidez.
### Importancia del Movimiento Regular
Las articulaciones, como las de la cadera, el hombro, la rodilla y el codo, son articulaciones sinoviales, lo que significa que están rodeadas por una cápsula que contiene líquido sinovial. Este líquido actúa como un lubricante natural, nutriendo el cartílago y evitando su desgaste. Según el Dr. Gbolahan Okubadejo, cirujano de columna en Nueva York, dedicar unos minutos cada mañana a estiramientos puede ser muy beneficioso. Estos estiramientos ayudan a mejorar la movilidad y a reducir la rigidez que a menudo acompaña al envejecimiento.
Además de estirarse, se recomienda realizar al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana. Actividades como yoga, pilates, tai chi y natación son excelentes opciones, ya que no solo promueven la flexibilidad, sino que también fortalecen los músculos que soportan las articulaciones. La Dra. Anna Noel Miller, presidenta de ortopedia en el Centro Médico Dartmouth Hitchcock, sugiere que los ejercicios de bajo impacto, como caminar o andar en bicicleta, son más beneficiosos que actividades de alto impacto como correr, que pueden causar estrés adicional en las articulaciones.
### Suplementos y Precauciones
El mercado está lleno de suplementos que prometen mejorar la salud articular, como la glucosamina y la condroitina. Sin embargo, la Dra. Antonia Chen, presidenta de cirugía ortopédica en el Centro Médico UT Southwestern, advierte que la evidencia científica sobre la eficacia de estos productos es contradictoria. Aunque aproximadamente 6.5 millones de adultos en Estados Unidos consumen estos suplementos, es fundamental consultar a un médico antes de comenzar cualquier régimen de suplementación. Esto es especialmente importante para evaluar posibles efectos secundarios o interacciones con otros medicamentos.
Los expertos también aconsejan optar por suplementos que hayan sido certificados por organismos independientes, como NSF International, que verifican la calidad y composición de los productos. Sin embargo, los hábitos de vida saludables son considerados más efectivos que cualquier suplemento. Mantenerse activo, seguir una dieta equilibrada y controlar el peso corporal son estrategias clave para conservar la flexibilidad articular.
### Hábitos Saludables para las Articulaciones
Los hábitos de vida saludables son esenciales para la salud articular. Mantener un peso corporal adecuado es crucial, ya que cada libra de peso adicional ejerce presión adicional sobre las articulaciones, especialmente las de las piernas. Según el Dr. Padavan, perder cinco libras puede aliviar casi 20 libras de presión sobre las rodillas. Por lo tanto, una dieta equilibrada y la práctica regular de ejercicio son fundamentales.
La Arthritis Foundation recomienda seguir una dieta antiinflamatoria, que puede ayudar a reducir el dolor articular. Por otro lado, el consumo frecuente de alimentos ultraprocesados se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar artritis. Además, es importante evitar estar sentado durante períodos prolongados. El Dr. Okubadejo sugiere levantarse y moverse al menos cada hora para mejorar la circulación y prevenir la rigidez.
### Reconocer los Signos de Alerta
Es común asociar el dolor articular con el envejecimiento, pero los expertos advierten que no se debe ignorar. Si el dolor alcanza un nivel de cuatro o más en una escala del cero al diez, o si hay calor, enrojecimiento o hinchazón en la zona afectada, es importante buscar atención médica. La Dra. Chen aclara que ciertos crujidos matutinos son normales, pero si la rigidez dura más de una hora o el dolor interfiere con las actividades diarias, se debe consultar a un profesional de la salud.
Mantener las articulaciones sanas y flexibles es un objetivo alcanzable con la combinación adecuada de ejercicio, hábitos alimenticios saludables y atención médica. Al adoptar un enfoque proactivo hacia la salud articular, es posible disfrutar de una vida activa y sin dolor a medida que se envejece.
