El consumo de cerveza en España ha experimentado una notable disminución durante el año 2024, marcando una tendencia preocupante para el sector. Según los últimos datos, se comercializaron 38.600 millones de litros de cerveza, lo que representa una caída del 0,2% en comparación con el año anterior. Este descenso se convierte en un fenómeno alarmante, ya que es la segunda vez consecutiva que se registra una baja en las ventas, algo que no ocurría desde la crisis financiera de 2008. El consumo per cápita también ha sufrido un golpe significativo, cayendo casi un 5% hasta alcanzar los 52,8 litros por persona.
A pesar de que la economía muestra signos de recuperación y el turismo se encuentra en auge, la patronal del sector cervecero ha hecho un llamado a la reflexión sobre estos datos. Jacobo Olalla Marañón, director general de Cerveceros de España, enfatiza la necesidad de diversificar las fuentes de crecimiento y de reforzar los aspectos que hacen al sector único. En su análisis, destaca la importancia de una hostelería de proximidad, que no solo sea diversa, sino que también esté profundamente enraizada en la cultura local y ofrezca productos de calidad a precios razonables.
La hostelería sigue siendo el principal canal de ventas para la cerveza en España, con 19.500 millones de litros vendidos a través de bares y restaurantes. Sin embargo, este canal ha visto una disminución en su ventaja sobre las ventas en supermercados, que alcanzaron los 19.100 millones de litros. Este cambio en el comportamiento del consumidor puede atribuirse a diversos factores, incluyendo la percepción de la economía y cambios socioeconómicos que han llevado a un aumento en el consumo en el hogar. Las empresas cerveceras han señalado que, aunque la afluencia a los bares se mantiene, los clientes tienden a realizar solo una consumición en lugar de varias.
El panorama del consumo extradoméstico también ha sido desalentador. Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el año 2024 no ha sido favorable para el consumo fuera de casa, con un descenso del 2,2% en las consumiciones, lo que equivale a 12.493 millones de consumiciones. El volumen de alimentos y bebidas consumidos fuera de casa también ha disminuido, con una reducción del 1,7% hasta 108,32 kilos/litros por persona. A pesar de que el gasto per cápita ha aumentado ligeramente, alcanzando 1.010,51 euros, este incremento se debe principalmente a la subida de precios, lo que refleja una presión inflacionaria en el sector.
La restauración y los comedores han sido particularmente afectados por la inflación, con un aumento del 4,7% en el conjunto del año, y un 5,5% en Galicia. Este incremento se suma a los aumentos previos del 7% en 2023 y otro 7% en 2022, lo que ha llevado a un encarecimiento acumulado del 25% en los productos de hostelería en la comunidad. La crisis provocada por la pandemia de COVID-19 también ha dejado su huella, ya que el consumo extradoméstico aún no ha logrado recuperarse a los niveles previos a la crisis, con un retroceso del 23,4% en el volumen de alimentos y bebidas desde 2019.
En Galicia, el consumo per cápita de comidas y bebidas fuera de casa ha caído a 109,6 kilos/litros en 2024, lo que representa una disminución del 20% en comparación con 2023. Cada gallego consumió de media 34,5 kilos de comida fuera de casa, un 10,4% menos que el año anterior. Las bebidas frías, que son la principal opción de consumo, también han visto una caída del 12%, mientras que las bebidas calientes y aperitivos han disminuido en un 2,5% y un 7,7%, respectivamente.
A pesar de estas caídas, algunas regiones como Cataluña y Aragón han liderado el consumo extradoméstico, con cifras que superan la media nacional. En general, el establecimiento sigue siendo el lugar preferido para consumir fuera de casa, representando el 71,7% de las preferencias, seguido por el domicilio y el trabajo. Las comidas familiares son la principal motivación para salir a comer, seguidas de encuentros con amigos y parejas. Sin embargo, el deseo de celebrar o simplemente salir a disfrutar de una bebida se ha convertido en un factor determinante en la decisión de consumir fuera de casa.
La situación actual del consumo de cerveza y comidas fuera de casa en España refleja un cambio en las dinámicas de consumo que podría tener implicaciones significativas para el sector de la hostelería y la industria cervecera. La necesidad de adaptarse a estos cambios y encontrar nuevas formas de atraer a los consumidores será crucial para la recuperación y el crecimiento futuro del sector.