La frase «¿Te hago un Bizum?» se ha convertido en parte del lenguaje cotidiano en España, al igual que pedir la cuenta en un restaurante. Desde su lanzamiento en 2016, Bizum ha evolucionado de ser una simple herramienta para transferencias entre amigos a convertirse en un pilar fundamental de la innovación bancaria en el país. Con más de 30 millones de usuarios activos y un promedio de 3 millones de transacciones diarias, Bizum ha demostrado ser un éxito rotundo en la transformación del dinero en España.
Desarrollado por la Sociedad de Procedimientos de Pago S.L. y respaldado por casi todas las entidades bancarias del país, como CaixaBank, BBVA, Banco Sabadell y Santander, Bizum ha logrado una adopción masiva sin las fricciones típicas que suelen acompañar a las nuevas tecnologías financieras. En 2024, se procesaron más de 1.100 millones de transacciones, que sumaron un valor total de 44.000 millones de euros. Además, más de 60.000 comercios, principalmente en línea, ya aceptan Bizum, lo que lo posiciona como el segundo método de pago más utilizado en el comercio electrónico en España, solo detrás de las tarjetas de crédito.
La clave del éxito de Bizum radica en su simplicidad: solo se necesita un número de teléfono vinculado a una cuenta bancaria para realizar transacciones. Esta facilidad, junto con la inmediatez y la confianza que genera al estar integrado en las aplicaciones bancarias, ha permitido que su uso se expanda más allá de las transferencias entre particulares. Hoy en día, Bizum se utiliza para donaciones, pagos a la administración pública, matrículas universitarias y suscripciones digitales.
**Bizum y su Proyección Europea**
El crecimiento de Bizum no ha pasado desapercibido en Bruselas. La Comisión Europea y el Banco Central Europeo (BCE) han estado trabajando en la creación de un sistema de pagos que sea independiente de las grandes redes globales como Visa y Mastercard. En este contexto, Bizum se ha convertido en un modelo a seguir para la construcción de una futura red de pagos soberanos en Europa.
En 2025, Bizum, junto con Bancomat de Italia y MB Way de Portugal, formaron la European Payments Alliance (EuroPA), que se asoció con la European Payments Initiative (EPI Company) para desarrollar un hub paneuropeo que permita realizar pagos instantáneos entre los países de la Unión Europea. El objetivo es que un ciudadano español pueda enviar un Bizum a un amigo en Lisboa o Milán en cuestión de segundos, utilizando su propia aplicación bancaria. Los primeros pilotos de este sistema están programados para finales de este año o principios del siguiente.
Sin embargo, el camino hacia la dominación de Bizum en el comercio europeo no está exento de desafíos. Aunque su liderazgo en España es indiscutible, convertirse en un actor dominante en el comercio europeo implica superar diversas barreras estructurales, tecnológicas y culturales. Cada país europeo cuenta con su propio sistema de pagos instantáneos, como Blik en Polonia, Swish en Suecia y Bancomat Pay en Italia. La clave del éxito radicará en la interoperabilidad, lo que requerirá la creación de estándares técnicos y normativos entre bancos y autoridades nacionales.
Otro obstáculo es la baja adopción de Bizum en comercios físicos. Aunque ha ganado terreno en el comercio electrónico español, su presencia en puntos de venta físicos sigue siendo limitada. La adopción de terminales SoftPOS, que permiten pagos desde móviles o tablets sin necesidad de un TPV, avanza lentamente en Europa, lo que dificulta su expansión en tiendas físicas. Además, en varios países europeos, el efectivo sigue siendo un medio de pago preferido, lo que representa un desafío cultural y generacional para la aceptación de pagos digitales.
**El Futuro de Bizum y la Soberanía Digital**
Más allá de su éxito operativo, Bizum representa una apuesta por la soberanía tecnológica en Europa. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha enfatizado la necesidad de que Europa desarrolle «infraestructuras de pago propias, seguras y eficientes». Bizum, junto con sus homólogos nórdicos y mediterráneos, se presenta como el experimento más avanzado de esta visión: un sistema europeo que compite en igualdad de condiciones con las grandes tecnológicas y refuerza la autonomía financiera del continente.
En los próximos meses, Bizum planea incorporar pagos mediante tecnología NFC, expandir Bizum Pay para suscripciones y fortalecer su presencia en el comercio físico. Estos desarrollos serán cruciales para determinar si la plataforma española puede mantener su liderazgo y escalar su modelo al resto de Europa, donde la competencia con Apple Pay, Google Pay y las tarjetas tradicionales será intensa. La evolución de Bizum demuestra que España ha sabido transformar una necesidad cotidiana en una infraestructura estratégica, y su éxito podría marcar el rumbo del dinero digital en Europa.
