La situación en la Franja de Gaza se ha vuelto crítica tras una reciente oleada de bombardeos israelíes que ha dejado un saldo devastador. Desde la tarde del martes hasta las primeras horas del miércoles, se han reportado al menos 91 palestinos muertos, entre ellos 24 niños y 7 mujeres, según fuentes de las morgues de los hospitales y de la Defensa Civil Palestina. Este ataque se produce tras la orden del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien acusó a Hamas de violar el alto el fuego que había estado vigente durante más de dos semanas.
Los bombardeos han afectado diversas áreas de la Franja, con un enfoque particular en el centro, donde se han registrado la mayoría de las víctimas. En el campo de refugiados de Nuseirat, al menos 42 personas perdieron la vida debido a ataques aéreos, muchos de los cuales fueron realizados con drones. Uno de los incidentes más trágicos ocurrió cuando Israel destruyó la casa de la familia Abu Dalal, resultando en la muerte de 20 personas, de las cuales 15 fueron trasladadas a la morgue y otras cinco permanecen atrapadas entre los escombros.
Además, el ejército israelí ha atacado tiendas de campaña que albergaban a desplazados en otras zonas del centro del enclave. Un ataque en el campamento de Arad Insan dejó al menos seis muertos, mientras que otros cinco gazatíes fueron asesinados en un ataque con un dron suicida en la plaza municipal de Deir Al Balaj. En la ciudad de Gaza, donde miles de personas habían comenzado a regresar tras la entrada en vigor del alto el fuego, al menos 28 personas han muerto, la mayoría en ataques a apartamentos familiares. En el sur de Gaza, se han reportado 18 muertes, incluyendo cinco personas que fallecieron tras el bombardeo de un vehículo civil cerca de Jan Yunis.
La escalada de violencia ha llevado a Netanyahu a ordenar ataques contundentes en la Franja de Gaza, tras una reunión de seguridad con su gabinete. Esta decisión se tomó después de que Hamas devolviera a Israel restos de un rehén, que fueron identificados como pertenecientes a un cautivo cuyo cuerpo ya había sido recuperado en 2023. Además, Israel ha afirmado que miembros de Hamas atacaron a sus soldados en Rafah, resultando en la muerte de un militar israelí, aunque el grupo palestino ha negado cualquier vinculación con estos ataques.
En medio de esta crisis, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado que Israel tiene derecho a tomar represalias ante los ataques en Gaza. Desde el Air Force One, Trump se refirió a la muerte de un soldado israelí y reafirmó que el alto el fuego, implementado bajo su propuesta, no está en peligro, aunque reconoció que podrían ocurrir pequeños ataques. Trump también minimizó la influencia de Hamas en el proceso de paz en Oriente Medio, sugiriendo que el grupo es una parte muy pequeña del mismo y que sus integrantes deben comportarse adecuadamente.
La situación humanitaria en Gaza es alarmante, con un número creciente de víctimas y un impacto devastador en la población civil. Los ataques aéreos han destruido hogares y han dejado a muchas familias sin refugio, aumentando el número de desplazados en la región. La comunidad internacional observa con preocupación el deterioro de la situación y la falta de un diálogo efectivo que pueda llevar a una resolución pacífica del conflicto.
A medida que los bombardeos continúan, la incertidumbre y el miedo reinan entre los habitantes de Gaza. La necesidad de un alto el fuego duradero y de un proceso de paz efectivo se vuelve cada vez más urgente. La comunidad internacional debe actuar para garantizar la protección de los civiles y buscar soluciones que pongan fin a la violencia en la región. La historia de Gaza es una historia de sufrimiento y resistencia, y es fundamental que se escuchen las voces de aquellos que claman por la paz y la justicia en medio de la adversidad.
