La recaudación tributaria en Galicia ha mostrado un notable crecimiento en los últimos meses, reflejando la resiliencia de la economía española frente a las tensiones geopolíticas y la incertidumbre en el comercio global. Según los últimos datos, en mayo los ingresos tributarios aumentaron un 17,1%, acumulando un alza del 11% en lo que va del año, alcanzando un total de 122.082 millones de euros. Este crecimiento se debe en gran parte a la recuperación del IVA, impulsada por el aumento en la producción de energía eléctrica, así como a un buen desempeño del Impuesto sobre la Renta de los No Residentes y a las fuertes retenciones laborales.
La expansión del empleo, tras la normalización post-pandemia, ha sido un factor clave en este aumento, consolidándose como el principal motor de la recaudación fiscal. Durante los primeros cinco meses del año, Galicia generó más de 2.000 millones de euros en ingresos fiscales, lo que representa un incremento del 7% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Sin embargo, a pesar de este crecimiento, se ha observado una suave desaceleración en la recaudación, atribuida a los menores incrementos salariales de este año.
### Distribución de Ingresos: Un Análisis Detallado
La composición de los ingresos fiscales en Galicia revela una distribución desigual entre los diferentes grupos de contribuyentes. Los datos indican que los contribuyentes con patrimonios elevados son los que más se benefician de los intereses generados por depósitos bancarios y otros activos financieros. En 2023, las ganancias por estos conceptos alcanzaron los 2.120 millones de euros en la comunidad. Aproximadamente 474.000 contribuyentes declararon ingresos de capital mobiliario, con un promedio de 4.472 euros por persona. Sin embargo, un tercio de estos rendimientos, cerca de 712 millones de euros, se concentra en solo 538 gallegos que tienen ingresos anuales superiores a los 601.000 euros, representando apenas el 0,1% de las declaraciones del IRPF.
Por otro lado, los contribuyentes de rentas altas también han notificado al fisco una parte significativa de sus ingresos provenientes de inversiones. En total, declararon 421,4 millones de euros, lo que equivale a alrededor de 755.100 euros por persona. En contraste, el 17% de los rendimientos incluidos en la base imponible del ahorro, que suman 380 millones de euros, provienen de 4.835 gallegos con ingresos totales entre 150.000 y 601.000 euros. Además, los 34.400 contribuyentes que se encuentran en la franja de 60.000 a 150.000 euros generaron 452,3 millones en rendimientos de ahorros y otras inversiones financieras.
La situación es aún más marcada en los tramos de ingresos más bajos. Cerca de 300.000 gallegos, que representan seis de cada diez contribuyentes, tienen ingresos por debajo de los 30.000 euros. Sin embargo, su cuota en las ganancias declaradas es solo del 11%, con un total de 234 millones de euros. Este fenómeno pone de manifiesto la desigualdad en la distribución de la riqueza y los ingresos en la comunidad.
### El Impacto del Empleo en la Recaudación
La principal fuente de ingresos en Galicia proviene del trabajo. En 2023, 1.352.625 gallegos declararon rendimientos laborales que sumaron 34.075 millones de euros. El número de contribuyentes aumentó un 3,5%, lo que equivale a 45.800 personas más, y el monto total de los ingresos laborales creció un 8,8%, alcanzando 2.761 millones de euros. Esto se traduce en un ingreso promedio de 25.205 euros por persona, lo que representa un incremento del 5,1% en comparación con el año anterior.
Este crecimiento en los ingresos laborales ha llevado a un cambio significativo en la estructura de los grupos salariales. En 2022, el grupo mayoritario de contribuyentes se encontraba en la franja de ingresos de 12.000 a 21.000 euros, con aproximadamente 314.200 personas. Sin embargo, en 2023, el grupo predominante ha cambiado a aquellos que ganan entre 30.000 y 60.000 euros, que suman alrededor de 283.400 contribuyentes, representando el 21% del total.
La crisis sanitaria del COVID-19 ha acelerado la digitalización y la transición energética, lo que ha beneficiado a sectores de alto valor añadido. Además, la reforma laboral de 2022, que prioriza los contratos indefinidos, ha contribuido a mejorar las condiciones laborales y, por ende, la base de cotización media en Galicia, que ha cerrado el año pasado cerca de los 2.100 euros, un 21,2% por encima de los niveles prepandemia.
Este panorama fiscal en Galicia refleja no solo la recuperación económica, sino también las desigualdades que persisten en la distribución de la riqueza y los ingresos. A medida que la economía continúa evolucionando, será crucial observar cómo se desarrollan estas tendencias y su impacto en la sociedad gallega.